Yo fui un cebolla adolescente. La siniestra aunque gloriosa juventud y una listaza de himnos goths.
Como buen chaquetero existencial en mi tierna juventud abracé unas cuantas tribus urbanas. Por algunas pasé rozando el larguero, muy fugazmente, pero por otras y concretamente en la siniestra entré de lleno, a saco y me quedé un rato. En mi entorno social los chicos de 14 años frecuentaban discotecas como Up&Down y Regine´s, guettos…